En aquellas clases de diseño de carteles, muchos recordaremos a nuestros maestros mencionar que lo que enriquece al cartel no solo es una buena idea u originalidad, conceptos que no siempre podrán ser buenos si no están siendo sustentados por un tratamiento o un buen dominio del oficio, concepto que siempre peleaba y salía a relucir en las cátedras del maestro René Azcuy. Con algunos miles de carteles que he visto en lo poco que llevo en esta carrera, he notado la existencia excesiva de similitudes en conceptos, ideas, tratamientos, etcétera, gráficas parecidas entre sí, desde Vietnam hasta el DF, desde Egipto hasta Puebla, y es que esto me ha llevado a pensar si en el mundo del cartel este empezando una crisis de originalidad, de ponerle, o mejor dicho, de no ponerle coco a la situación. Por otro lado me surgieron muchas preguntas, ¿entonces en qué consiste una gráfica diferente, y en qué consiste una gráfica digna de decir, esto es original y esto es diferente?, creo que es una respuesta bastante incierta. Pero buscaba en todo este embrollo palabras clave que me ayudaran a sustentar un poco esta teoría, y ya decía el maestro Renato Aranda, ganador de la II Bienal Iberoamericana del cartel, Bolivia 2005: "algunos diseñadores gráficos han optado por dar a los mensajes un tratamiento literal, elemental, obvio; según ellos un tratamiento complejo disminuye las posibilidades de posicionamiento" y asimismo apunta; "pero al respecto tengo dos objeciones, por un lado estas posiciones subestiman la capacidad intelectual del público; por otro omite las bondades de un tratamiento no lineal". Bueno, con todo esto estoy de acuerdo en que realmente existen este tipo de gráficas, un poco faltas de.
Cuando conoces a los grandes del diseño, hablando de Drewinsky, Gorka, Tanaka, Le Quernec etcétera, son muy buenos astros para apoyarte en ellos, crees que lo has visto todo, pero de momento saltan maestros de lo imposible y el ilusionismo como Shigeo Fukuda e Istvan Orosz, maestros de la metáfora como Wieslaw Walkuski, Roman Cieslewics, Rafal Olbinski, entre otros, y es entonces cuando piensas que ya todo está dicho, pero también nos encontramos con otras formas de hacer las cosas, como la gráfica que planteó René Azcuy en los 70´s, cuando todo era colores y movimientos, él se antepuso y convirtió las ideas en blancos y negros, nada mas, y el grupo Grapus ya extinto quienes marcaron también una forma nueva de decir las cosas.
Con todo esto concluyo que la gráfica es sumamente diversa, sí, así es pero, pongámoslo así, ahora ya conocemos las propuestas de Aranda, quien tiene ideas bastante pensadas, muy inteligentes, como diría Rafael López Castro en una conferencia de los "carteles 99 carteles" cuando comentó acerca del ingenio de Aranda, "ya lo quisiera para un domingo", pues bien, ésa técnica del vector ya la habíamos visto años atrás en Drewinsky y Fukuda, y en algunas ocasiones en Grapus, éstos últimos quienes fueron sumamente críticos, lúdicos y contestatarios. Creíamos también haberlo visto todo con ellos, pero también conocimos gráfica como la de Chaz Maviyanne, que en concepto también es muy fuerte contra las estructuras gubernamentales, y quien por cierto recurre a la fotografía igual como lo hizo el grupo francés Grapus, o el fotógrafo Italiano Oliviero Toscani.
De momento por ahí surgieron "nuevas ideas" con Michael Batory, pero nada sorprendente, nos emocionamos con Alejandro Magallanes y José María Morelos, trabajos que también ya tenían una cierta similitud con el trabajo de Peter Pocs o Isidro Ferrer, no por extraordinarios, sino que hacen uso de objetos cotidianos, para crear ambientes "fantásticos".
Ahora he estado metido un poco más en el concepto, tratando de estudiarlo y entenderlo, y la neta está ¡¡cabrón!! y he encontrado cosas interesantes, tal es el caso del maestro Osvaldo Gaona, quien tiene una gráfica bastante extraña, pero diferente, y un tanto apasionada, poética, y cargada de muchísima pero muchísima sexualidad, y digamos que erótica en algunos momentos, y pues defiendo el hecho de hacer cosas distintas, también ya lo mencionaba el maestro Azcuy en sus cátedras, "¡¡originalidad señores por favor!!", palabra muy poco ajustada a los diseñadores hoy en día. Y aunque Gaona recurre también al vector, no es tan molesto verlo, también hace uso de fotografía, fotos creando la ilusión de ver aquella pubis, que realmente era una barba (bueno, eso decía él, jeje) el uso que tiene por sus llamadas volutas digamos que no es tan usado hoy en día, y aunque recurre a las mismas técnicas, todo lo compensa dado el buen estudio que tiene sobre las composiciones, aa por cierto!!, además de atiborrar de colores sus theratos (un hobby de él), y que dan ganas de decirle literalmente bájale a tu tonito, algo realmente extraño.
Con todo esto no pretendo ni mucho menos descalificar el trabajo de nadie, absolutamente de nadie, si alguien lo puede descalificar, seguro ese no soy yo. Pero si quería enfatizar y puedo asegurar que todos tenemos las mismas ideas algunas veces, y las mismas técnicas (nada grave).
En mi hacer experimento con cosas nuevas, técnicas nuevas para mí, para otros ya bastante vetustas. Incluso uso mucho los vectores y a veces la fotografía, en una inquietud de buscar y encontrar un estilo propio.
Ahora ya no me llama la atención ver carteles a base de vectores ó tipográficos, realmente me aburren, (aunque la tipografía es hermosa) claro que me es más interesante el concepto y la idea, la forma, pero siempre me sorprenderán mas las obras como las de Walskuski, que recurre a técnicas tradicionales y esto enaltece al cartel, y que lejos de ser el maestro de la metáfora, el dominio que tiene del oficio es impecable. Por supuesto que también le apuesto a los anteriores mencionados como Ferrer y Peter Pocs.
El trabajar con elementos cotidianos, y transformarlos para darles otro concepto totalmente distinto, es un mundo genial que todos deberíamos de probar. De igual manera la fotografía bien cuidada y bien pensada puede llegar a ser apabullante. Por supuesto que los grabados no dejan de ser extraordinarios, también serían técnicas dignas de llamar la atención de cualquiera.
Las cosas cambiaron con Van de Velde y su obra "Tropon", por ahí de 1899. Aun más atrás, las cosas fueron mejores con Lautrec, o Alphonse Mucha, en fin, épocas realmente fascinantes. Espero que hagamos que esas épocas vuelvan a nuestros días creando cosas extraordinarias, y diseños realmente hermosos.
Esto es solo un comentario y una inquietud muy personal.
